Lamine Yamal ha recibido de manos de Juan Ignacio Gallardo, director de MARCA, el prestigioso Premio Di Stéfano al mejor jugador de la temporada. El atacante del FC Barcelona se impuso a figuras de primer nivel como Pedri, Raphinha, Lewandowski, Mbappé, Vinícius Júnior o Julián Álvarez.
A sus 18 años, el talento de Esplugues continúa confirmándose como el futbolista más determinante del panorama español e internacional. Lo extraordinario se ha vuelto rutina: competir por todos los premios individuales, marcar diferencias cada semana y romper récords de precocidad.
Acumular premios a la edad que tengo es algo muy positivo. Voy a seguir trabajando y peleando para conseguir cosas así.
Acostumbrados a la excelencia
Lamine nos ha hecho creer que es normal que:
- Con 15 años debutara en uno de los mejores clubes del mundo.
- Con 16 fuese ya imprescindible.
- Con 17 se convirtiera en la estrella del Barça y de la Selección Española.
- Con 18, tenga opciones reales de disputar el Balón de Oro.
Pero nada de esto es normal. Su talento está muy por encima de la lógica. El palmarés que ya acumula lo confirma: Eurocopa, Nations League, dos Ligas, Supercopa de España, Copa del Rey, además de dos Premios Kopa consecutivos. Una carrera excepcional para un futbolista que apenas comienza.
Tras unos meses difíciles, Lamine ha recuperado su versión más brillante: la del jugador que convierte cualquier partido en un espectáculo. Lo sensato es disfrutarlo. Lo realista, asumir que pasará mucho tiempo hasta volver a ver algo parecido.
El spotify camp nou, dosis EXTRA de motivación
Para el ‘10’ azulgrana, el regreso al Spotify Camp Nou supone una especie de “fichaje” emocional:
Montjuïc estaba bien, pero no era lo que queríamos. El Camp Nou será un apoyo muy grande para todos.
Lamine sabe que el estadio renovado será un motor afectivo para el equipo. La hinchada, ansiosa por volver a llenar su casa, será también un estímulo directo para él, que ya vivió un debut ilusionante en el nuevo coliseo.
La afición cuenta mucho. Hemos jugado en un campo que no era el nuestro.
Ambición sin límites
Su temporada está plagada de retos mayores: conquistar finalmente la Champions League, y disputar y tal vez ganar su primer Mundial. El joven crack lo tiene claro: no va a reservarse.
Lo quiero todo. Ojalá lo consiga todo y, mientras podamos jugar, es posible conseguirlo.
Lamine Yamal no tiene freno. Ni quiere ponerlo. Y el fútbol mundial observa cómo el número 1 también para MARCA apenas está escribiendo el prólogo de una carrera histórica.
