Surge otro talento brillante en La Masia, y ya son muchos los que se atreven a compararlo con Lamine Yamal.
El pasado miércoles, Ebrima Tunkara debutó con la selección española sub-17, firmando dos goles y una asistencia con tan solo 15 años. Entró desde el banquillo y fue decisivo en la victoria por las clasificatorias a la Eurocopa sub-17.
¿Quién es ebrima tunkara?
Nacido el 10 de marzo de 2010 en Lamoi (Gambia), Tunkara es uno de los talentos más prometedores del FC Barcelona. Llegó al club en 2018 y, desde entonces, no ha hecho más que destacar en todas las categorías. A pesar de su corta edad, compite regularmente con jugadores dos años mayores, formando parte de la plantilla del Juvenil A y alternando con la selección sub-17.
Apenas 12 minutos le bastaron en su reciente debut en la UEFA Youth League para mostrar su calidad ante rivales de mayor experiencia. Habitualmente actúa por la banda derecha, aunque también puede hacerlo como mediapunta, gracias a su gran lectura de juego y capacidad para asociarse en espacios reducidos.
Muchos lo señalan como el mayor talento desde la irrupción de Lamine Yamal, una comparación que habla del respeto y la ilusión que genera dentro del club. Con solo 15 años, su 1,80 m de altura, su velocidad y su versatilidad lo convierten en una de las joyas más prometedoras de La Masia.
Debut con la sub-17
Su primer partido con España no pudo ser mejor: dos goles y una asistencia en apenas unos minutos sobre el césped. Abrió el marcador con una gran jugada individual que terminó en asistencia para Santiago del Pino, amplió la ventaja con un potente disparo cruzado con la pierna derecha, y cerró su actuación con un penalti transformado por él mismo, tras provocarlo con una acción de velocidad y potencia.
Un debut soñado que lo coloca en el radar de todos los aficionados y analistas del fútbol base.
¿Qué podemos esperar de él?
La prudencia es fundamental. A su edad, cualquier proyección debe hacerse con calma. Pero lo que ya ha mostrado Ebrima Tunkara es digno de admiración: técnica, potencia, desparpajo, regate, dominio de ambas piernas y una madurez impropia de su edad.
Capaz de eludir rivales en cualquier zona del campo, se mueve con soltura por ambas bandas o por el carril central, con un juego entre líneas muy inteligente y una facilidad innata para romper defensas con sus movimientos interiores.
Todavía es pronto para pensar en el primer equipo, pero no sería extraño verlo ganar protagonismo en el Juvenil A o incluso debutar con el Barça Atlètic si continúa su progresión. No es necesario quemar etapas: lo que está haciendo ya es diferencial, y con tiempo y paciencia, Ebrima Tunkara promete dar mucho que hablar en los próximos años.
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