El 18 de diciembre de 2025, el día en el que se cumplieron cuatro años del primer gol de Gavi con el primer equipo del FC Barcelona, aquel tanto que marcó el inicio de una carrera meteórica y que confirmó que el club tenía entre manos a un futbolista diferente. Hoy, ese recuerdo adquiere todavía más peso por la ausencia prolongada de un jugador al que el Barça sigue echando de menos.
Un debut goleador que anunció carácter
Gavi marcó su primer gol con el Barça en diciembre de 2021, siendo apenas un adolescente, pero jugando ya con la personalidad de veterano. Aquel tanto no fue solo una estadística: fue una declaración de intenciones. Intensidad, valentía, llegada al área y una forma de competir que conectó de inmediato con la grada.

Desde ese momento, su crecimiento fue imparable. Se ganó un sitio en el once, se convirtió en internacional absoluto con España y pasó a ser uno de los símbolos del nuevo Barça, ese que mezclaba juventud, identidad y hambre.
dos años largos de ausencia que se siguen notando
La lesión de ligamento cruzado anterior sufrida en noviembre de 2023 con la selección española. Una ausencia prolongada, dura y silenciosa, que dejó un vacío evidente en el equipo. Gavi no solo aportaba fútbol; aportaba alma, algo que no siempre se puede medir con estadísticas.

En el vestuario y en la grada hay una sensación compartida: Gavi hace falta. No por nostalgia, sino por lo que representa en el campo. En un Barça joven y en construcción, su regreso será más que un refuerzo deportivo. Será recuperar una identidad competitiva que se echa de menos en muchos tramos de los partidos.
La trayectoria de un jugador que cambió partidos con actitud
Antes de su lesión, Gavi ya era indiscutible. Campeón de Liga, ganador del Golden Boy y del Kopa Trophy, su impacto iba mucho más allá de la edad. Presionaba, llegaba al área, daba equilibrio y asumía responsabilidades en escenarios grandes, sin miedo y sin complejos.
Era el tipo de jugador que elevaba al equipo en los días grises. El que entraba en una disputa como si fuera la última. El que entendía el escudo como una forma de jugar.

Un gol que sigue simbolizando futuro
Cuatro años después de aquel primer gol, Gavi no está sobre el césped, pero sigue muy presente en el Barça. En cada partido intenso que falta alguien que muerda, en cada encuentro donde se echa en falta carácter, aparece su recuerdo.
Ese gol de 2021 no fue solo el primero, fue el inicio de una historia que aún tiene muchos capítulos por escribir. Y cuando Gavi vuelva, el Camp Nou lo recibirá no como una promesa, sino como lo que ya es: un jugador imprescindible para entender este Barça.