Un FC Barcelona sediento de victoria golea al Barbastro en su primera eliminatoria de Copa del Rey. Lewandowski ha recuperado la dinámica goleadora con un doblete, Araujo ha vuelto a la titularidad después de seis meses y Szczesny se ha estrenado con la portería imbatida.
El equipo de Hansi Flick ha debutado en la Copa del Rey con la necesidad de ganar. La pérdida del liderato en LaLiga y las dolorosas derrotas ante Las Palmas, Leganés y Atlético han llevado al técnico alemán a presentar un once con pocas rotaciones para evitar más sorpresas. El objetivo principal es claro: encadenar victorias y reencontrarse con aquel fútbol arrollador para desprenderse de las malas sensaciones, arrastradas desde noviembre.
Una victoria por «todo lo alto»
En un campo de condiciones cuestionables y un rival que ha entrado al partido con mucha intensidad, el conjunto catalán empezaba con dificultades para confeccionar jugadas largas y de peligro, no conseguían progresar y el Barbastro tocaba, tímidamente, la puerta de Szczesny.
Sin embargo, los azulgranas han desarrollado alternativas mediante las cuales han ido obteniendo notoriedad en el juego y han anulado la solvencia defensiva del combinado oscense: por arriba. El gol que abrió la lata llegó tras un pase lateral de cabeza de Araujo para Eric García, que finalizó con el mismo recurso. El segundo tanto llegó a balón parado, un gran golpeo de Pablo Torre en el tiro libre envió el balón teledirigido a Lewandowski, quien no desaprovechó la oportunidad.
Torre, que no pisaba el terreno de juego desde finales de noviembre, se hizo valer. El cántabro demostró tener un guante en la pierna derecha, siendo ante el Barbastro el encargado principal de ejecutar las jugadas a balón parado y puso la guinda en el marcador tras un error garrafal en la salida de balón de la zaga aragonesa.
Lewandowski se reencuentra con el gol
El delantero, que ha sido uno de los jugadores más criticado en los últimos dos meses, no anotaba desde el pasado 7 de diciembre. El ariete polaco ha vuelto a la senda del gol con un doblete importante para recuperar buenas sensaciones, unas sensaciones necesarias con la inscripción de Pau Víctor en el aire, y que en caso de confirmarse su no reincorporación, se limitarían más los efectivos en ataque.
Con su actuación de esta noche, Lewandowski no solo disipó las dudas, sino que recordó por qué sigue siendo una pieza clave en el esquema ofensivo del Barça. Su primer gol, un remate certero tras una asistencia medida de Pablo Torre, mostró la precisión que lo caracteriza, mientras que el segundo, un 1 contra 1, tras un desmarque perfecto, fue un destello de su olfato goleador. Ambas dianas fueron celebradas con intensidad por el delantero, consciente de la importancia de recuperar confianza en este tramo decisivo de la temporada.
El regreso de Lewandowski al gol no solo supone un alivio para el equipo, sino también un mensaje de fortaleza para el vestuario y la afición. En un Barça que sigue construyendo su futuro con jóvenes talentos, el liderazgo del polaco en el campo es fundamental, especialmente en una competición como la Copa del Rey, donde cada detalle puede marcar la diferencia. Su rendimiento esta noche no solo allana el camino hacia la próxima ronda, sino que también refuerza la esperanza de que los mejores días del delantero en el Barça están lejos de haber terminado.
Araujo: un regreso sobresaliente
Ronald Araujo está de vuelta. El central uruguayo ha regresado a una titularidad después de medio año y se ha estrenado, en esta temporada, aportando la primera asistencia del 2025. El defensa, que ya había probado a portería con un potente testarazo, desviado a las mil maravillas por Arnau Fàbrega, dispuso de otro balón alto segundos después, donde no falló y, con la cabeza, cedió el esférico a Eric García para que abriera el marcador.
La presencia del charrúa en el once titular no solo fortalece la defensa, sino que también aporta una dosis extra de carácter y liderazgo que se echaba de menos en su ausencia. Durante el partido, el uruguayo mostró su habitual capacidad para ordenar la zaga, dando indicaciones constantes a sus compañeros y manteniendo la concentración del equipo en los momentos en los que el Barbastro intentó acercarse al área culé. Su jerarquía en el terreno de juego y su entrega en cada balón disputado son cualidades que lo convierten en uno de los jugadores más fiables y queridos por la afición.
Además, Araujo dejó claro que está completamente recuperado, no solo físicamente, sino también mentalmente, tras un periodo complicado por las lesiones. Su actuación es un mensaje contundente de que está listo para liderar al Barça en el tramo decisivo de la temporada. Con partidos clave en el horizonte, su regreso no solo refuerza la defensa, sino que también aporta una mayor seguridad en las transiciones defensivas y una amenaza constante en las jugadas a balón parado. Araujo ha vuelto, y lo ha hecho con un nivel digno de un auténtico capitán.
FICHA TÉCNICA
Resultado: UD Barbastro 0-4 FC Barcelona
Estadio: Estadio Municipal de Deportes de Barbastro
Goles: Eric García 21′ (0-1), Lewandowski 31′ (0-2) 47′ (0-3) y Pablo Torre 56′ (0-4)
Tarjetas amarillas: Guillermo Alonso 43′ y Lewandowski 51′.
Árbitro: Isidro Díaz de Mera
