Ya está trazado el camino hacia la gran final de la UEFA Women’s Champions League, que se disputará el próximo 23 de mayo en Oslo. El sorteo celebrado en la sede de la UEFA en Nyon ha definido el futuro europeo de los tres representantes españoles: FC Barcelona Femení, Atlético de Madrid y Real Madrid, con escenarios muy distintos para cada uno.

El conjunto azulgrana parte con ventaja. Mientras Atlético y Real Madrid deberán superar una ronda extra para seguir con vida, el Barça Femení espera rival directamente en cuartos tras una fase de grupos prácticamente perfecta.
El Barça, primero y con autoridad
El equipo dirigido por Pere Romeu ha sido el gran dominador entre los clubes españoles. Cerró la liguilla como líder, con pleno de victorias salvo el empate ante el Chelsea, y un contundente golaveraje de +17. Un rendimiento sobresaliente que le permite evitar los dieciseisavos y gestionar mejor la carga física de una plantilla castigada por las lesiones.

Además, el premio es doble: en cuartos y semifinales, el Barça jugaría la vuelta en el Johan Cruyff, una ventaja competitiva notable. En el horizonte aparece incluso la posibilidad de un Clásico europeo ante el Real Madrid, lo que añadiría un componente emocional a una eliminatoria en la que las catalanas partirían como favoritas.
Real Madrid y Atlético, obligados a superar un examen previo
La realidad es muy distinta para Atlético de Madrid y Real Madrid, que deberán afrontar eliminatorias exigentes desde el primer cruce. Las colchoneras se medirán al Manchester United, con la posibilidad de cruzarse después con el Bayern de Múnich, un camino duro que refleja su irregular fase de grupos.

El Real Madrid, pese a perder solo un partido en la liguilla, pagó caros sus empates y terminó fuera del top-4. Su primer obstáculo será el Paris FC, con la amenaza latente de reencontrarse con el Barça en cuartos.
El lado más temido del cuadro
En el otro lado del sorteo aparecen los grandes “cocos” del torneo: Chelsea, Arsenal (vigente campeón) y OL Lyonnes, que busca su novena Champions. Un sector que promete eliminatorias de altísimo nivel y que, salvo sorpresa, concentrará gran parte del favoritismo europeo.
El camino está definido. Ahora, el balón dictará sentencia. El Barça Femení avanza con paso firme, mientras el resto deberá sobrevivir antes de soñar con Oslo.