El regreso al Spotify Camp Nou está más cerca que nunca. El FC Barcelona ha recibido oficialmente la licencia de primera ocupación parcial, un paso clave que marca el inicio del retorno del equipo a su templo.
Después de más de un año de obras, el coloso azulgrana empieza a despertar. Con él, también lo hace la ilusión de una afición que sueña con volver a casa.

Un regreso simbólico y limitado
La licencia permitirá la presencia de 27.000 espectadores en las dos primeras graderías de Tribuna y Gol Sur, zonas ya adaptadas a las nuevas medidas de seguridad y accesibilidad. No será la imagen completa del Camp Nou que todos recuerdan, pero sí un símbolo poderoso: el conjunto culé vuelve a latir donde siempre perteneció.

Según ha confirmado el club, el regreso no será inmediato. La entidad prefiere esperar a la fase 1B de las obras, que ampliará el aforo hasta 45.000 localidades e incluirá la reapertura del Lateral, garantizando una experiencia más cómoda y segura tanto para los aficionados como para el cuerpo técnico.
Una obra que transforma más que un estadio
La nueva estructura incorporará tecnología avanzada, sostenibilidad energética y una mejora integral de la experiencia para socios y aficionados. El objetivo: convertir el Camp Nou en un referente mundial, no solo deportivo, sino también cultural.
Para los culés, este paso tiene un valor emocional incalculable. Tras meses en Montjuïc, el equipo podrá volver a sentir el aliento de su gente, aunque sea con un aforo parcial.
“Será un impulso anímico tremendo para todos” aseguran desde el entorno del vestuario.

Los azulgranas vuelve a su casa, poco a poco, ladrillo a ladrillo, grada a grada. Y aunque aún falta una razón la espera hasta completar el estadio al 100%, las 27.000 razones para ilusionarse ya son suficientes para encender de nuevo la llama culé.